"Estoy aquí esta noche no sólo para dirigirme a las distinguidas damas y caballeros en este gran recinto, sino para hablar directa y francamente con los hombres y mujeres que nos trajeron aquí.
Sé que para muchos estadounidenses que nos observan en este momento, el estado de nuestra economía es una inquietud mayor que todas las demás. Y con toda razón. Si no han sido afectados personalmente por esta recesión, probablemente conocen a alguien que ha sido afectado: un amigo, un vecino, un miembro de su familia. No necesitan escuchar otra lista de datos para saber que nuestra economía se encuentra en crisis, porque la viven todos los días. Es la preocupación con la que se despiertan y motivo de desvelo de noche. Es el empleo que pensaron que tendrían hasta jubilarse, pero que ahora han perdido; el negocio con el que soñaron y que ahora pende de un hilo; la carta de aceptación a la universidad que su hijo tuvo que volver a guardar en el sobre. El impacto de esta recesión es real y está por todas partes.
Pero a pesar de que nuestra economía se haya debilitado y nuestra confianza se vea afectada; a pesar de que estamos viviendo en tiempos difíciles e inciertos, esta noche quiero que todo estadounidense sepa lo siguiente: (...)
Lea el discurso completo en www.whitehouse.gov
Bueno... el discurso de Obama motiva. No se quién puede decir lo contrario.Hoy escuche voces en Colombia que expresaban lo general del discurso, que era un discurso programático. Las mismas apreciaciones escuchadas cuando pronunció su discurso de posesión.
ResponderEliminarEs un discurso que inspira a cualquiera, renueva la confianza, devuelve la esperanza. Las acciones tomadas en estos primeros días de su administración demuestran que si se podían hacer cosas que un mes atrás eran imposibles, existía la más grande desesperanza. Que diferente a los discursos acostumbrados aquí en América del Sur. Obama pinta como un excelente estratega. Suena como uno de los mejores coachs en la dirección de un gran equipo. Suena a ganador.